Rocinante

D. Quijote, serio, valiente, altivo y con la lanza presta, divisa a los gigantes que le amenazan, mientras Rocinante cansado, con las crines sudadas y los cascos en la tierra, advierte que no pasa nada. No obstante agacha las orejas porque conoce al caballero y sabe que la puede armar.

Obsérvese que no lleva escudo porque naturalmente lo porta su escudero Sancho.

El escudero Sancho.

Encantadora chica oriental posa arrimada al rocín de Sancho.

Fotos para el recuerdo

Todos nos llevamos fotos de los lugares que nos gustan y con nosotros delante, para que quede constancia, para enseñarlas y para recordarlo. Quede aquí la imagen de esa instantánea de ilusión de estas dos jóvenes encantadoras.

A gusto en la plaza mayor

El sol, el ocio y el entorno predisponen al ánimo de la buena gente a estar a gusto con sus parejas, con su libro o, incluso, fotografiando el mismo paisaje de siempre, pero al que la cámara no se resiste.

Capilla del Obispo

Azulejo de la calle de los mancebos

No se sabe exactamente la relacíon de la palabra mancebo, que en su acepción actual más cotidiana, sería joven, con las argollas y cadenas del azulejo. Tampoco se sabe la relación razonada, que el término "mancebía" tiene con mancebo, pues es verdad que a la mancebía irian e irán, los mancebos, pero también otros varones de más edad y posibles. Sirva esta fotografía, con sol madrileño de mañana, al menos para buscar respuestas.

Visitante friolera en un banco de la Plaza Mayor

Un domingo a finales de verano, esta interesante mujer, descansaba en su visita a la Villa, y aprovechaba el descanso para seguir con la lectura de su novela. ¡El sitio es perfecto!. Lo de la bufanda un enigma.

Cerería

Imagen de la primera década del XXI en Madrid, precísamente en la calle de La Paloma, pero que podría pertenecer, sin ninguna duda, a la primera década del siglo XX.

Bancos de la Plaza Mayor

La remodelación de la Plaza Mayor en los 80, dejó cuatro bancos circulares alrededor de sendas farolas. En los bancos se han grabado en bronce, escenas de la historia de la plaza, como ésta de carnavales y escenas cotidianas de siglos anteriores.

Grabados en bancos de la Plaza Mayor

Cuenta este grabado cosas que en este blog no se van a escribir.

Felipe III

La reina Isabel II, mayor de edad por decreto a los trece años, para ser reina, hija del nefasto Fenando VII, y madre de Alfonso XII, a quien dejó en el palacio de Oriente de Madrid, exiliándose ella a un palacio más tranquilo en Francia, emplazó aquí la estatua de Felipe III, diseñada y ejecutada por el escultor italiano Pietro Taca entre 1610 y 1614. 

Lo ordenó así la reina dado que este magnate restituyó la corte en Madrid, y además ordenó la construcción de esta plaza.

G. Adolfo Bécquer criticó el abultado abdomen del caballo y a la vista de la imagen de perfil, cierta razón llevaba el poeta.

Reloj de Sol en Lavapiés

Medianería ilustrada con balcón y con mujer tendiendo ropa, y con reloj de sol que, además de marcar la hora solar, explosiona como fuego artificial, con cientos de signos y sus sombras.

Otro reloj de Sol y además, también de Luna

Curiosamente la sombra que marca la hora en los relojes de sol, gira en sentido contrario de las manillas del reloj.

Este reloj de sol y de luna de la Puerta de Toledo es, según se dice, de gran exactitud científica, pues dispone de tablas de corrección horaria según el mes en que se mira.

Balcón del Palacio Real

Balcón especial del Palacio Real. Sin contraventanas. Es distinto a la generalidad. A lo mejor fue un dormitorio real, o un despacho real, y a través de sus cristales miraban a sus súbditos alguno de sus majestades Alfonsos, o la reina Isabe lI, o alguno de sus amantes, quién sabe. En cualquier caso ya no se asoma nadie. Ahora sólo sirve para iluminar el interior, embellecer el exterior y hacer placentero el paseo a los viandantes de la calle Bailén, que bien mirado, no es poco.

Fuente de los delfines

Posiblemente la fuente más bella de Madrid del siglo XX, sita en la plaza de la República Argentina.

Su surtidor de agua, supera en atura, milagros de la perspectiva, el maravillososo edificio del banco de Bilbao.

El agua en efervescencia

Fuente de los delfines

El juego de la luz, el agua y los delfines.